… y te encuentro aquí, en tu nueva casa con vistas al mar (C/ San Marcos, bloque 41), rodeada de los tuyos – que antes eran nuestros – mientras yo continúo viaje, solo.

Y sin tu techo el sol pica más fuerte y la lluvia cala más hondo. Y nuestra lista de planes pendientes sigue creciendo, porque yo todavía cuento contigo…